Seguramente que muchas personas te han hablado de Roma, Venecia, Florencia o muchas ciudades importantes que tiene el país de la pasta y la pizza, pero estoy seguro que pocos te han hablado de Bolonia. Estas líneas, lejos están de desprestigiar al avasallante turismo de las ciudades citadas, que claramente son una joya del país europeo, lo que trato de decir, es que, en mis últimos años, estoy intentando cambiar el foco de los viajes y hacerlo por destinos menos transitados. Seguro que sudamericanos que vienen de viaje a Europa no pondrían en el radar a Bolonia, pero lo raro es que muchos, viviendo en Europa, siguen sin poner sus radares en este tipo de ciudades. Según mi experiencia, creo que la diversificación es maravillosa y da más entusiasmo al viajar. Espero que este post te inspire y sea la puerta de entrada a conocer lugares menos masificados. Me alegra presentarte la bonita ciudad de Bolonia!


Como llegar a Bolonia.

Al ser una ciudad europea no vas a tener mayores complicaciones para llegar hasta Guglielmo Marconi, su aeropuerto. Si buscas con tiempo, podrás encontrar vuelos baratos para llegar a Bolonia. Una vez en el aeropuerto podes tomar el tren que se llama expres Marconi que te dejara en el centro de la ciudad en poco más de 30 minutos, el valor del billete es de 1,70 €, pero ojo, solo se puede pagar con tarjeta de débito con contacto y se acepta una tarjeta por pasajero, si pagas en efectivo el valor es más caro.

Donde dormir en Bolonia.

Oferta hotelera no le falta a esta ciudad de casi 400.000 personas, por lo que podrás encontrar una gama variada de precios. Nosotros nos alojamos en las afueras del centro, a unos 2 km aproximadamente. Si no te gusta caminar, no te preocupes, tenes buses cerca que te llevan al centro, se puede pagar con tarjeta de débito (1,50 €), o si pagas con monedas el valor es 2€. Nosotros nos alojamos en Villa Masi Rental Rooms y pagamos por una habitación doble con desayuno y baño compartido, 144€ por dos noches.

Que ver en Bolonia.

Conocida como la Dotta, por tener la universidad más antigua del mundo, esto hace que esta ciudad tenga mucha vida universitaria, y créeme que no le faltan atractivos que visitar. Te recomiendo que mínimo le dediques dos días completos para llevarte una buena impresión de que hay atrás de esta bonita ciudad. Recorda que siempre es buena idea realizar algún free tour , así sabes por donde moverte y conoces algo de la historia y curiosidades de la ciudad. Quiero confesarte que no venía con mucha expectativa a la Bolonia, pero déjame decirte que me ha sorprendido gratamente, tanto que no descarto volver algún día.


Piazza Maggiore.

Este punto es el centro mas centro que te puedas imaginar en cualquier ciudad, se dice que en esta plaza si te quedaras un día entero podrías ver pasar a toda la población. Vida es lo que no le falta a esta plaza del siglo XIII, la cual tiene muchas cositas bonitas para ver, que te cuento a continuación.


Basílica de San Petronio.

Ubicada en plena Piazza Maggiore, esta basílica me dejo loco, con su fachada inacabada, (tiene dos colores y texturas diferentes) le dan un toque súper especial, convirtiéndola en uno de los símbolos emblemáticos de Bolonia. Con sus 132m de largo, 60m de ancho y una altura de 45m, hacen de ella la quinta basílica más grande de Italia. Su construcción es del año 1390. Se puede visitar gratuitamente.


Fuente de Neptuno.

A pocos metros de la Piazza Maggiore reposa Neptuno, firme con su tridente, custodiando las aguas de la ciudad. En la parte baja de la fuente también podrás ver esculturas de sirenas. Su construcción se remonta al año 1565.


Caminar por la Vía Independencia.

Esta avenida nace justo detrás de la fuente de Neptuno, tiene muchas locales y un tráfico peatonal increíble con muchos artistas callejeros. Mientras caminas vas a ver los famosos pórticos de Bolonia, los cuales tienen 40km de recorrido en toda la ciudad, por lo que no necesitas paraguas para visitar Bolonia, ja. Una parte de ellos, desde el 2021 son considerados patrimonio de la humanidad por la Unesco. A Bolonia se la conoce como la Rossa, la roja, por el color de la mayoría de sus edificios.


Visitar las Due Torri.

Sin dudas que estas dos torres son el símbolo de la ciudad, torre Asinelli, la más alta, torre Garisenda, la más inclinada. La torre Garisenda llego a tener unos 60m de altura, pero por miedo a que se derrumbara por como cedió el terreno, se mandó a recortar en el siglo XIV, actualmente tiene 47m, fue construida en el año 1109.


La torre Asinelli tiene 97m de altura y también está un poco inclinada, queda claro que este lugar no era el mejor para construir torres, je. Fue construida en el mismo periodo que la torre Garisenda, sobre el 1119. Se puede visitar y tras superar sus casi 500 escalones de madera, tendrás unas vistas hermosas de la ciudad, su entrada cuesta 5€ y hay que reservar hora para visitarla.

Torre Prendiparte.

Si queres visitar torres, Bolonia es tu ciudad, llego a tener más de 100 torres en la edad media, de las cuales 27 se mantienen en la actualidad. Por lo masificada que esta la torre Asinelli, decidí visitar la torre Prendiparte, una curiosa torre familiar, en si es una casa torre, está atendida por sus dueños y solo abre los domingos y feriados, su entrada cuesta 5€. Te esperan unos 271 escalones de madera mientras ves distintas partes de la torre/casa, el dueño estaba leyendo un libro en una especie de living en un segundo piso. Sin dudas que es algo muy curioso y me alegró poder visitarla. Las vistas desde la cima son excelentes, con sus 60m de altura, la posicionan como la segunda más alta de la ciudad.


Catedral de San Pedro.

Ubicada en la vía independencia, esta catedral románica del siglo X se puede visitar de manera gratuita. Al estar como “encerrada” por la avenida, no se puede disfrutar mucho de su arquitectura. Su tamaño es enorme, pero para mi criterio al ser catedral, sinceramente debería ser más bonita.


Iglesia Santo Stefano.

Sin dudas que recomiendo que visites esta curiosa iglesia, ubicada en la plaza con el mismo nombre. A esta iglesia se la conoce como Chiesa delle sette chiese, porque está compuesta por siete edificios religiosos de diferentes épocas y todos se los puede visitar. Su entrada es gratuita y sus horarios son 9:30 a 12:30 y de 14:30 a 19:00. La plaza que esta junto a esta iglesia tiene mucha vida de noche y muchos bares ponen en ella mesas para comer o tomar algo.


Casa Isolani.

Cerca de la iglesia de Santo Stefano, encontraras una casa medieval del siglo XIII que todavía mantiene intacta su estructura sobre pilares de madera. Por la parte delantera es como un mini centro comercial, su entrada es gratuita y sin dudas algo curioso de ver.


Santuario de San Luca.

Un imperdible en tu visita a Bolonia debe ser el Santuario San Luca, ubicado a unos 4km del centro de la ciudad, donde sobre una colina reposa este hermoso santuario, es un lugar ideal para hacer un stop y tomarse unos mates. Para llegar hasta ahí caminando, lo podes hacer casi en su totalidad a través de pórticos, para ser exactos, desde la puerta Zaragoza te separan unos 665 pórticos todos numerados y con figuras religiosas en casi todos. Es un sitio de peregrinación y te recomiendo que, aunque sea la ida o la vuelta la realices caminando. Si no queres caminar, tranquilo que se puede llegar al santuario en bus.


Museos de Bolonia.

Si sos de visitar museos, hay una gran oferta en la ciudad, solo por nombrarte algunos podes visitar el museo cívico medieval, el museo arqueológico, museo de historia, museo internacional y biblioteca de la música, museo de Davai Bargellini, nosotros visitamos este último, con entrada gratuita. Es un antiguo palacio convertido a museo, donde tienen un sin fin de objetos antiguos de Bolonia, con decirte que tenian hasta una carrosa de finales del siglo XVIII .


Finistrella, la ventana de los canales.

Bolonia tenía muchos canales por donde se introducían mercancías a la ciudad, se decía que competía con Venecia. Estos canales se fueron cubriendo a lo largo de los siglos XIX y XX. En la actualidad solo queda un pequeño tramo y es visible desde dos partes, aunque la más bonita es la finistrella, una ventana de hierro que da a la calle, en lo que parece una casa normal, pero que al abrirla veras un pulmón de aire entre las casas y el canal pasando por debajo, es un lugar instragrameable, por lo que siempre veras gente haciendo fila para mirar por la ventana.


Iglesia de San Francisco.

Esta iglesia está un poco apartada de la zona turística y eso se agradece, ya que podrás respirar un poco de paz, fue la primera iglesia de estilo gótico francés en Italia. Se empezó a construir en el siglo XIII. Antes de entrar encontraras unos mausoleos del mismo siglo.


Bolonia tiene muchas iglesias bonitas que visitar, pero una de las que más nos impacto fue la basílica de San Antonio, la cual te recomiendo que visites.

Qué comer en Bolonia.

Además de la Dotta y la Rossa, a Bolonia se la conoce como la Grassa, la gorda, por su comida. Sin dudas que es uno de los lugares emblemáticos de la gastronomía italiana, dueña de la creación de la salsa bolognesa, que es conocida en toda Italia bajo el nombre de ragù. Sin dudas que unos tagliatelle al ragù encontraras en muchos restaurantes. La lasaña es otro de los platos que encontraras con mucha facilidad y te recomiendo que pruebes. Otro de los inventos de la gastronomía boloñesa son los tortellini in brodo, que son unos capeletis rellenos en sopa.


Seguramente muchos restaurantes sean buenos en Bolonia, pero te dejo tres recomendaciones hechas por amigos italianos locales.

Osteria dell’Orsa, ubicada en pleno centro, hay que hacer fila para entrar, se come bien y barato, me encanto.

Osteria al 15, lugar súper chiquito y con mucho encanto, no pudimos comer por qué se necesitaba reserva, así que te lo dejo para que me confirmes las recomendaciones de mis amigos italianos.

Trattoria Trebbi, justo a la vuelta de Osteria al 15, se encuentra esta trattoria muy grande con mesas en el exterior, se come muy bien, un poquito más caro que Osteria dell’Orsa.

Comer un helado en Santo Stefano.

Para cerrar este post con un sabor dulce, tan dulce como fue mi visita por Bolonia, te recomiendo que pruebes un helado en la cremería Santo Stefano. Para todos los argentinos que viajamos por Europa, una de las cosas que siempre extrañamos es comer un buen helado, y quiero decirte que en Bolonia he comido uno de los helados más ricos de todos los que probé en el viejo continente. La heladería está cerca de la iglesia que le da el nombre, además tiene muchas cosas para probar de pastelería.


Sin dudas te invito a que visites esta hermosa ciudad italiana que me ha dejado impactado, por su vida en las calles, por sus pórticos, por su gastronomía y el sin fin de cosas para visitar, Bolonia será sin duda, una ciudad que te hará pensar el turismo hacia ciudades menos masificadas. Como siempre tenes los comentarios disponibles para cualquier duda o ampliación del post.